Con base en un completo estudio de expectativas y hábitos de consumo de los colombianos, el cual arrojó que alrededor del 55 % de los consumidores buscan activamente reducir el consumo de azúcar, sal y grasas, Pollos Bucanero (de Cargill) implementó una serie de transformaciones que van desde la cría de las aves, hasta el producto final entregado al consumidor.
De manera especial, la innovación en los empaques de presentaciones al detal se destaca como un componente esencial en dichos cambios, destinados, sobre todo, a garantizar la frescura del producto durante toda la cadena previa a su llegada a la mesa de los hogares. Esto se puede evidenciar, a través de tecnologías cómo:
- Bandejas antiderrames: Que generan mayor conservación de la frescura y un cierre hermético para evitar derrames, asegurando la higiene del producto.
- Practipack: Empaque conveniente con abre fácil, porcionado al vacío para mantener la frescura y facilitar el almacenamiento.
- Claripack: Empaque individual al vacío que permite a los consumidores verificar calidad y fecha de vencimiento, ofreciendo una experiencia de compra más transparente.
Javier Brenes, director ejecutivo de Cargill, explicó que “estas implementaciones reflejan nuestro compromiso continuo con la calidad, la innovación y el crecimiento sostenible en el mercado colombiano. La visión a largo plazo nos guía para escuchar, adaptarnos y seguir siendo confiables a medida que el mundo evoluciona. Y así es como satisfacemos las necesidades cambiantes de las personas y de las generaciones venideras”.
Finalmente, agregó el alto directivo que “hoy en día, sabemos gracias a múltiples estudios que asuntos como la producción local, orgánica y sostenible en el consumo, están ganando importancia progresivamente entre los colombianos al elegir los alimentos que incorporan en su alimentación. Nuestros pollos son criados en granjas colombianas. Esta iniciativa no solo respalda la calidad del producto: también contribuye al desarrollo sostenible de las comunidades locales”.