El gubernamental Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) publicó su más reciente censo avícola, con los datos actualizados correspondientes al presente año. Dentro de las cifras globales más relevantes, se encuentra que la avicultura comercial de ese país cuenta con una capacidad instalada para albergar una parvada general de 223 millones de aves pertenecientes a la especie gallus gallus domesticus.
De dicho número, 148 millones de individuos corresponderían a pollos de engorde y 75 millones a ponedoras comerciales. De los primeros, puede decirse que se podrían levantar en 6158 granjas, en tanto que para las segundas existen 2557 predios con instalaciones tecnificadas disponibles.
En lo que respecta al pollo de engorde, tal capacidad instalada permite proyectar una producción de 1.85 millones de toneladas, muy similar a lo estimado para el cierre de la presente vigencia por la gremial Federación Nacional de Avicultores de Colombia (Fenavi), lo cual muestra a las claras que habrá muy poca capacidad ociosa.
Los departamentos colombianos líderes en la producción de pollos de engorde son, en su orden: Santander (oriente, 37 millones de aves), Valle del Cauca (occidente, 27.2 millones de pollos), Cundinamarca (centro,24.7 millones), Quindío (centro occidente, 15 millones) y Atlántico (Caribe, 7.12 millones).
En gallinas ponedoras, su producción de huevos de mesa sería cercana a los 17 mil millones de unidades, volumen que permite satisfacer la demanda interna (315 huevos per cápita anuales). El escalafón de los primeros cinco departamentos avícolas en aves de postura varía con respecto al de pollos de engorde.
El primero en ponedoras es Cundinamarca (14.3 millones), seguido por Santander (14.27 millones), Valle del Cauca (13.7 millones), Antioquia (noroccidente, 6.4 millones) y Cauca (6.2 millones). Tanto en granjas comerciales de pollo de engorde como en ponedoras, existen instalaciones en 30 de los 32 departamentos colombianos.
Llama la atención el creciente número de pequeñas explotaciones avícolas de traspatio, según el informe entregado por el ICA, un 17% más respecto a 2019. Estos predios se usan tanto para pollos de engorde como para ponedoras; hoy se habla de más de 9.2 millones de estas aves en 467.803 traspatios. Esta contundente realidad numérica entraña un potencial riesgo sanitario y una tarea titánica para su efectiva vigilancia y control en bioseguridad.