El Programa Económico de la gremial avícola colombiana Fenavi publicó recientemente su proyección de lo que será la producción de huevos de mesa al cierre de la presente vigencia. De acuerdo con esta dependencia, “con el encasetamiento al mes de agosto se cierra la estimación de producción del renglón huevo en el 2022. En efecto, la producción llegó (llegará) a 16.250 millones de unidades, con una reducción de 4,6%”.
Dicho vaticinio se basa en que las pollitas de un día necesitan en promedio 16 semanas (4 meses) para iniciar su fase de producción comercial, con lo cual estas aves serán las últimas encasetadas que podrán aportar a la cifra final de huevos correspondiente a este año.
“Esta cifra corresponde a una estimación nominal, es decir, no capta los efectos del bloqueo el año anterior. Por ello se proyecta que la reducción podría superar el 6,5%”, dice el organismo de Fenavi, haciendo referencia a los disturbios que durante dos meses afectaron el ciclo productivo avícola y de toda actividad productiva en el país andino, durante el primer semestre de 2021.
Agrega el informe que “las cifras de la producción/oferta esconden un detalle para destacar, si bien se trata de una reducción en el 2022, al compararla con el 2019, considerado como un año normal, tendríamos un crecimiento de 13%. Esto nos lleva a señalar que al tiempo que la oferta ha crecido entre el 2020 y el 2021, la demanda ha tenido un crecimiento mayor, por efectos de pandemia, el bloqueo y la inflación, que no se esperaba por lo demás”.
Por último, con estas cifras consolidadas para el mes de agosto se puede concluir que “con la producción estimada para el 2022, llegamos (llegaremos), a un consumo per cápita de 315 unidades de huevos al año, sin considerar la importación de los ovoproductos. Esto implica una reducción de 5.6% frente al 2021 (334 unidades/año). Es decir, que en teoría tendríamos un déficit de oferta de 965 millones de unidades año (80.4 millones mes), el equivalente a 71.3% de un mes de producción”.