Sin importaciones, Cuba no puede alimentar a su población. Más de 60 años de desastrosas decisiones le han llevado a no poder garantizar su seguridad alimentaria y mucho menos su soberanía en esa misma materia.
La isla apenas exportó dos mil millones de dólares el año pasado, pero importó bienes por más de US$10.065 millones. De esa última cantidad, alrededor de US$360 millones corresponden a carne de pollo, adquirida casi toda de los Estados Unidos.
Semestralmente, las importaciones de pollo por parte de los cubanos sumaron unas 141 mil toneladas. Un simple cálculo matemático lleva a deducir que el precio por tonelada apenas sobrepasó los US$915. ¿Alguien puede competir?
Al parecer, un par de empresas avícolas colombianas lo quieren intentar y ya lograron la homologación sanitaria para tal fin. También se habla de productores de carne de cerdo, res, leche, en fin, de todo lo que se necesita en las vacías despensas de los hogares cubanos.
Desde este año 2023, la agroindustria colombiana no paga arancel por el maíz amarillo duro y transgénico (¡bendito sea!) estadounidense, en virtud del TLC, aunque en la práctica eso ya pasaba desde 2020 por tecnicismos combinados con otros acuerdos.
La soya gringa entra sin impuesto a Colombia desde 2012, pero igual los precios del producto final no darían margen para competir por el momento, a menos que medie algún factor ajeno al mercado (como la política y el incentivo gubernamental).
La gremial avícola colombiana Fenavi publicó la semana pasada un interesante comparativo con Estados Unidos sobre precios mayoristas de pollo y sus cortes. En el único ítem donde resulta ganadora la proteína suramericana es en el pollo entero con vísceras, pero su precio por tonelada sería superior a los US $2.000.
En pechugas, alitas, pero sobre todo en perniles, poco que hacer. En estos últimos, el comparativo por tonelada rondaría los US$710 contra US$2.000. Se tendería a pensar que el interés de avicultores colombianos en Cuba es inusitado o incluso oportunista, pero la verdad es que arrancaron con los trámites en 2019.
Esperemos. Habría que cerrar diciendo que en Colombia hay, desde hace varios años, 15 plantas procesadoras habilitadas para exportar pollo y derivados a seis destinos en Asia y Europa oriental, más Cuba ahora. Están en lista para abrir Emiratos Árabes, Líbano, Arabia Saudita, pero nada se exporta. Los números no cierran. Ya veremos.