En 2020 produjo casi 38 millones de toneladas en casi 300 plantas y junto con Brasil y Argentina forman parte del top 10.
La producción anual de alimentos balanceados en México ha mantenido un crecimiento promedio de 4% durante los últimos cuatro años.
Durante varios años, México se mantuvo como el sexto productor global de alimentos balanceados. En su última edición, la Encuesta Global sobre Alimento Balanceado de Alltech 2021, destacó que México subió una posición en el ranking mundial y hoy está en el quinto puesto, con una producción cercana a 38 millones de toneladas.
Otro dato importante en la encuesta es que la producción de alimento balanceado creció 1% a nivel mundial respecto a 2019, al lograr 1.187,7 millones de toneladas métricas producidas. De América Latina, Brasil, México y Argentina forman parte del top 10 global.
Genaro Bernal, Director General del Consejo Nacional de Alimentos Balanceados y Nutrición Animal A.C. (Conafab) comentó: “La información de la reciente Encuesta Global sobre Alimento Balanceado de Alltech, demuestra el dinamismo y el papel de nuestro sector para contribuir a la seguridad alimentaria de la población. Los números de nuestro país, subrayan la gran contribución de nuestra industria al desarrollo económico del país”.
El directivo también destaca el compromiso que tiene la industria con la investigación, producción y formulación de alimentos balanceados que garanticen la salud, la inocuidad, la productividad y el desarrollo social y productivo de México. Estas actividades se realizan en las cerca de 600 plantas productoras de alimentos balanceados que hay en el país.
En la Encuesta Alltech encontramos que México, Chile, Argentina y Colombia registraron un aumento en la producción de alimento balanceado para porcinos, por la demanda de este tipo de proteína durante la contingencia sanitaria por covid-19. Lo anterior se debe a lo accesible que es este tipo de carne por sus precios moderados.
Para Conafab la seguridad alimentaria no solo tiene que ver con la cantidad de alimento, también involucra calidad, inocuidad y trazabilidad del producto en todas las fases de la producción, así como en la alimentación de pequeñas especies.
El incremento en la producción ha generado beneficios directos, principalmente al sector pecuario, al cubrir la demanda de esta materia prima que requieren para garantizar una proteína animal de calidad para los mexicanos.
El sector no solo es esencial para mantener la estabilidad en el suministro de alimentos para la industria de animales productivos, sino también para los de compañía, que han cobrado un papel relevante dentro del núcleo familiar, sobre todo durante la pandemia al contribuir al bienestar de la población en general.